En La Natividad Polo, la pasión por Argentina se vive dentro y fuera de la cancha. Este año, para festejar nuestras fechas patrias, quisimos crear una estampa que no solo rindiera homenaje a nuestro país, sino que también conectara con el estilo y la identidad de quienes viven el polo con orgullo.
Inspiración con historia y significado El proceso de diseño comenzó con una mirada hacia nuestros símbolos patrios. Observamos elementos clásicos de la cultura argentina: desde insignias universitarias tradicionales hasta objetos de colección con valor histórico. Entre ellos, la moneda argentina se convirtió en un punto de partida clave. Su diseño, cargado de simbolismo y memoria, nos pareció perfecto para reinterpretar.
La palabra Argentina como protagonista El primer elemento que definimos fue la tipografía: la palabra “Argentina” aparece en forma curva, amplia, con un trazo que recuerda a los sellos institucionales. Queríamos que tuviera presencia y peso, pero también una actitud relajada, urbana. Es un gráfico que puede llevarse con jeans, bombachas o pantalones de montar.
El escudo: del peso al polo Justo debajo, el centro de la estampa lo ocupa un escudo inspirado en la moneda argentina. Pero en lugar de reproducirlo fielmente, lo transformamos: en su interior conviven elementos clásicos con referencias al mundo del polo. Es un homenaje a nuestro deporte, declarado oficial en Argentina desde 1953, y a su relevancia cultural. El escudo combina la historia con nuestra esencia: caballos, mallets, laureles y la estética de La Nati.
Un diseño que une tradición y estilo La estampa está disponible en buzos y remeras 100% algodón, en colores que remiten a nuestra bandera y a la tierra: gris, azul, celeste, verde militar. Es un diseño patriótico, pero también cool. Pensado para llevar el orgullo de ser argentinos a todos lados: en la cancha, en la tribuna o en el día a día.
La Natividad: polo, pasión y Argentina Este gráfico representa mucho más que una estampa. Es una declaración de identidad. Porque en La Natividad, diseñamos con sentido, con raíces, y con la convicción de que el polo argentino merece vestirse con el mismo nivel de orgullo que se juega.
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